30.9.11

tal día como hoy

Hoy, al levantarme, tenía una sensación extraña. De esas sensaciones que tienes cuando te parece que estás olvidando algo importante, cuando crees que tienes que acordarte de algo que, por lo que sea, merece ser recordado. Me levanté con una cierta nostalgia, con mayor emotividad de la que habitualmente tengo... Quise pensar que estaba relacionado con el día que tenía por delante. Por la mañana, en Oviedo, reunión sobre fondos mineros. Por la tarde, dirección Madrid, para participar en la Conferencia Política del PSOE.

De repente, sin buscar explicaciones a mis sentimientos, un chispazo, un recuerdo, me ha hecho pensar el porqué de tanta emotividad... Hoy cumplo tres años como Alcalde de Laviana.

Efectivamente, aquel 30 de septiembre de 2008, asumí la Alcaldía de mi concejo. Lo hice tras la dimisión del anterior Alcalde, Marcia, quién siempre tendrá y tiene mi cariño y mi afecto... Tres años para cambiar Laviana pero también para que cambiara la situación general de una forma radical. Entonces, se empezaba a hablar de la crisis. Hoy, la sufrimos. Un Ayuntamiento como el nuestro, delicado ya entonces económicamente, la ha sufrido como nadie, con un desplome garrafal de nuestros ingresos... Entonces, Zapatero acababa de ser reelegido, ese mismo año, Presidente del Gobierno de una forma contundente. Hoy, estamos ante unas elecciones generales que se presumen sean las más difíciles de la historia para mi partido, el PSOE...

En estos tres años han cambiado muchas cosas. Muchas cosas han cambiado en Laviana. Piscinas, La Avenida, Casa de Cultura, Parque de Barredos, Aceras a Tiraña, Fontoria Nueva, la Rectoral de Tolivia... Muchas, muchas cosas han cambiado para bien. Hemos construido una forma de gobierno con los ciudadanos, que quiero seguir mejorando. Y hemos hecho de la infacia, una prioridad.

Pero también en estos tres años hemos cometido errores. Yo el primero y los asumo. El error forma parte de lo más profundo del ser humano. Ahora bien, los errores sirven si de ellos se sacan lecciones. Yo, cada día, saco lecciones de lo que sucede en mi vida y de las decisiones que tomo. Sólo así doy respuesta al reto de mejorar.

Ahora, tres años después, sigo siendo el mismo de entonces. Tengo la misma ilusión, la misma pasión, las mismas ganas. Sigo soñando como sueñan los niños, sabiendo que sólo con sueños se puede predecir la realidad. Sigo teniendo la misma energía -aunque ahora más experiencia-. Sigo teniendo la misma capacidad de ser alguien moderado, tolerante, que acepta las críticas y que no guarda rencor ni a aquellos que calumnian o difaman porque no saben hacer otra cosa. Sigo amando la Política, así escrita, con mayúsculas, porque la Política es algo grande. Sigo sintiendo como sentía entonces, sintiendo las cosas grandes y pequeñas. Sigo queriendo a los míos, porque los míos, son el núcleo básico de mi vida. Mi familia -tanto la biológica, como la que me ha dado la vida, la de los amigos- sigue siendo, ahora y siempre, algo fundamental en mi vida. Me da fuerzas para seguir creyendo en Laviana, para no rendirme y para pese a los problemas, seguir luchando.

Aunque no todo es igual: aquel 30 de septiembre mi güelito Tito estaba en el salón de plenos mostrándose orgulloso de mi elección como Alcalde. Hoy, su presencia es el recuerdo. Sigue ahí, pero de otra forma. Ya no podré darle un beso y decirle que hace tres años me elegían Alcalde. Lo sé, un beso no le podré dar pero si le podré dedicar estas palabras...

Gracias a todos por estar ahí. Por dedicarme una sonrisa cuando nos vemos. Por las críticas que hacéis pensando en mejorar Laviana. Por perdonar mis errores. Por ayudarme a ser mejor persona. Por arrancarme a mí una sonrisa. Por hacerme feliz, aunque sea por un tiempo...

Hoy y siempre, ¡gracias!

26.9.11

con pasión


Hace unos días, leyendo una entrevista a un político, le preguntaban cuales eran sus pasiones. No es una pregunta sin sentido, sino una pregunta que precisa de una pronta y sincera respuesta. Un político sin pasión, sin ganas de nada, es un político llamado a cometer errores, a no representar las ambiciones de los suyos ni a actuar con fuerza. Es un político fracasado, que traiciona a sus votantes.

Si a mí me hicieran esta pregunta diría, sin pensarlo siquiera, que mis dos pasiones, en Política -hoy- son dos. Una, mi pasión por Laviana. Dos, mi pasión por el PSOE, por el proyecto político del que formo parte desde hace muchos años.

Esta pasión, este sentir con pasión, se ha visto reflejado en un anuncio que recientemente se ha hecho público: mi inclusión, como número 6, en la candidatura de los socialistas asturianos al Congreso de los Diputados, de cara a las próximas elecciones generales. Siempre es un honor que tu partido te pida que formes parte de una candidatura y este honor es, aún mayor, cuando los tiempos políticos que corren no son favorables para tu partido... Mis dos pasiones se han visto reflejadas en mi pertenencia a la candidatura socialista. Y es que, como es bien sabido, voy en un puesto de la lista, el número 6, que significa que voy en un puesto para no salir elegido. La razón es clara: antes del 22 de mayo adopté una decisión -tras escuchar a los vecinos de Laviana- de presentarme a la Alcaldía. Por tanto, a unos meses de las elecciones, mi pertenencia a cualquier candidatura siempre tiene un límite: seguir desempeñando mis funciones de Alcalde, cumplir con mis compromisos con Laviana y con mis vecinos.

Pero también mi inclusión representa mi otra pasión, mi pertenencia al PSOE, mi orgullo de ser socialista, de contribuir a mi proyecto político. Es un honor que mi partido, el PSOE, me haya incluido en las listas. Y es un orgullo, siempre, representar a Laviana, a las gentes de las cuencas mineras, en todo momento.

Los agoreros que decían antes del 22 de mayo que no me iba a presentar porque me quería ir para otro sitio se encontraron con mi respuesta: presentarme a la Alcaldía, a pesar de las opciones que se me plantearon. Ahora, los agoreros que dicen que quiero huir de Laviana se encuentran con la otra respuesta: aquí sigo. Lamento que los hechos, siempre los hechos, den respuestas a sus deseos expresados como calumnias. Es lo que tiene jugar a ser aprendices de brujos... Que no dan una.

Y es que, amigos míos, yo vivo las cosas con pasión. Soy político porque es lo que quiero, porque creo en el servicio público, porque creo que necesitamos gente que viva la Política con pasión, con ganas, con energías. Y porque además, ahora más que nunca, que vivimos tiempos tan difíciles, mi compromiso con Laviana a través del proyecto político socialista está más presente que nunca.

12.9.11

la bandera bien alta en Funeres


El pasado sábado 10 de septiembre los socialistas tuvimos una nueva cita con nuestra historia y nuestra memoria: Funeres. Allí acudimos cientos de socialistas -muchos de ellos jóvenes- a honrar a aquellos hombres que, en 1948, fueron capturados, torturados y arrojados vivos al fondo de este pozu natural situado en las montañas de Peñamayor.

A Funeres los socialistas vamos siempre a honrar nuestra memoria. No nos lleva el odio ni el rencor. Nos lleva nuestra negativa a olvidar, como mejor forma de construir una sociedad más justa, más libre, dónde pensar de forma diferente, no sea sinónimo de cárcel, tortura o asesinato. Parece mentira, han pasado muchos años desde aquel tétrico 1948 y aún hoy, no hace nada, hemos visto como un nuevo Funeres se cometía ante la mirada de todo el mundo, en la isla de Utoya, en Noruega.

Los socialistas vamos a Funeres, también, a cargar las "pilas". Tras el batacazo del mes de mayo, en el que los ciudadanos nos impusieron un correctivo claro y rotundo, hemos analizado nuestra gestión y hemos sacado conclusiones: tenemos que cambiar para seguir cambiando la sociedad. Por eso, de cara a las elecciones del 20 de Noviembre, los socialistas nos presentaremos con un proyecto nuevo, completamente reformado, atento a la realidad pero también atento a lo que nos demandan los ciudadanos. Y lo hacemos con el mejor de los candidatos que tenemos: Rubalcaba.

Sabemos que estas elecciones se presentan difíciles. Siendo sincero, son las más difíciles de nuestra historia y partimos con una clara desventaja que reflejan las encuestas. Ahora, nada es imposible. Por eso vamos a poner todas nuestras energías en explicar nuestro proyecto a los ciudadanos, explicarles que está en juego la propia supervivencia del estado de Bienestar tal y como lo conocemos. Por fin, con hechos en la mano, empezamos a saber cómo actuará el Gobierno de España si lo preside el PP. Castilla-La Mancha es buen ejemplo de qué políticas quieren aplicar. Ello me lleva a acordarme de un refrán que, cambiado, nos viene como anillo al dedo: "cuando las barbas de Castilla-LaMancha veas pelar, pon las de España a remojar".

En estos tiempos difíciles para el PSOE y para los socialistas, sólo me resta decir una cosa: ante Funeres los socialistas podemos decir que nos sentimos orgullosos de lucir en nuestro corazón las centenarias siglas del PSOE, de compartir militancia con los mártires de la Libertad y defender, como ellos, la Democracia.

La bandera socialista bien alta en Funeres.