Laviana
está en pleno proceso de debate de los Presupuestos Municipales. El
jueves 5 de mayo se votan. Es cierto que no es el mejor momento: el
próximo 26 de junio hay elecciones generales y el debate político
nacional todo lo llena y "contamina".
Los
presupuestos son importantes para Laviana porque de su aprobación
dependen cuestiones fundamentales. La propuesta del Gobierno Local
recoge, en este sentido, peticiones de vecinos y de los grupos políticos
municipales, en un intento de que los presupuestos sean lo más
representativos posibles.
Comenzando por las
inversiones. Si los presupuestos se aprueban, se ejecutarán las
siguientes inversiones: Reforma del Recinto Ferial Polivalente (11.000
euros); Arreglo de la Escuela de Villoria (6.100 euros); Arreglo de la
cancha de Tiraña (20.000 euros); Restauración del Lavadero de Llorío
(20.800 euros); Señalización carretera de Les Bories (18.700 euros);
Mantenimiento de aceras áreas urbanas (14.000 euros); Adecuación entorno
Parque de Barredos (3.000 euros) y mejoras vial de acceso a El Condao
(6.000 euros).
A mayores, los presupuestos
recogen otras ideas fundamentales: dedicar más dinero a la Escuela de
Verano (en total se gastarían 12.363 euros), de apoyo a la Asociación de
Amigos del Descenso Folklórico (15.000 euros), de apoyo a nuestros
autónomos y comerciantes agrupados en AULAV (10.000 euros), para
colaborar a la investigación contra el cáncer, apoyando económicamente
al IUOPA (3.338 euros) o una nueva partida de mantenimiento de las zonas
infantiles (6.000 euros), entre otras.
Sólo la
aprobación de los presupuestos municipales significarían ejecutar esas
partidas. De ahí que la aprobación de los presupuestos no es sólo
importante para el Gobierno Local de Laviana sino sobre todo, es
fundamental para Laviana. En este momento trascendental es necesario que
pida un Sí a estos presupuestos, que pida un Sí a Laviana.
Del
Pleno del Ayuntamiento de Laviana y de los diferentes grupos políticos
municipales depende ahora. Y pensando en Laviana, un Sí es la
respuesta...
*Artículo publicado en La Cuenca del Nalón en el mes de mayo