El PSOE ha ganado las elecciones en Laviana y, también, en Asturias.
En Laviana hemos ganado de forma contundente. Lo hemos hecho obteniendo un 38,3% de los votos, casi un 3% más que en las elecciones autonómicas de hace 10 meses y ampliando nuestra ventaja respecto al segundo partido más votado. Los socialistas de Laviana, una vez más, somos la fuerza más querida por las gentes de Laviana. Y de estas elecciones sacamos una segunda lectura en Laviana: la estrategia de algún partido, basada en campañas de ataques en lo personal y el insulto no gustan a los lavianeses.
Pero además, el PSOE ha ganado las elecciones en Asturias. Somos, con diferencia, la fuerza política más votada y la que mayor número de escaños obtiene en la Junta General, el parlamento de Asturias. Javier Fernández, con su apuesta por la seriedad, ha sido, con diferencia, el candidato más votado por los asturianos y asturianas.
Por todo ello, desde la mayor humildad y desde el convencimiento que nuestra forma de hacer política, basada en el respeto, el diálogo y el tender puentes, es la preferida por el pueblo de Laviana, os damos, de corazón, las gracias.
El domingo, los asturianos y asturianas decidiremos, con nuestro voto, quién queremos que sea nuestro Presidente los próximos años. Hoy finaliza la campaña electoral más atípica de nuestra historia. Y es justo que, a la hora de hacer balance, comencemos por el principio.
Estas elecciones nunca deberían de haber tenido lugar. No lo digo ya por el coste económico que suponen -solo en organizar las mismas 3 millones de euros- sino, sobre todo, por la imagen de debilidad y por el parón que suponen para Asturias. Hace diez meses, los asturianos y asturianas dieron a Francisco Álvarez-Cascos la mayoría de escaños -16- y le encargaron que formase gobierno. Su aliado natural (por razones ideológicas), el PP, obtuvo 10. Juntos, sumaban una mayoría amplísima. Y aún siendo así, han sido incapaces de pactar, de llegar a acuerdos. Y la opción de Cascos, en vez de forzar acuerdos, fue convocar estas elecciones.
Asturias, ante el 25 de marzo, tiene una segunda oportunidad. Invito ya, desde aquí, a la ciudadanía a acudir a las elecciones el próximo domingo y decidir, con su voto, el destino de Asturias. Nosotros, los asturianos, somos los únicos dueños de nuestros destinos.
El próximo domingo votaré a Javier Fernández. Lo haré porque creo en la seriedad que me transmite. No lo votaré haciendo un concurso de carisma, sino pensando en lo mejor para Asturias. Y lo mejor para Asturias es que haya un gobierno. Un gobierno serio. Y que gobierne. Pero Javier no es sólo la opción de los socialistas. Es la opción -lo será el domingo- de todos aquellos asturianos y asturianas que, sin sentirse socialistas, están hartos de la inestabilidad política de Asturias. Que están hartos de que las dos fuerzas de la derecha hayan convertido Asturias en su particular campo de batalla. Esos asturianos, sin compromisos o afinidades ideológicas, votarán a Javier por el rigor que representa, por su imagen de hombre sensato, por la seriedad que transmite. Porque representa la Asturias en serio en la que muchísima gente creémos.
Con todo el respeto al actual Presidente de Asturias -aquí, en este blog, se respeta a todo el mundo y no caben insultos ni descalificaciones-, creo que su gestión no ha estado a la altura de lo que sus votantes de mayo esperaban de él. Tengo la sensación de que muchos de sus votantes de mayo se sienten defraudados. No toda la culpa la tiene él, claro está -a veces le han ayudado a su desgaste algunos de los que presumen de ser sus máximos defensores-, pero ésa es la realidad que palpo. Ante esta situación, el domingo los asturianos habremos de decidir si queremos que Cascos siga siendo Presidente o si le damos una oportunidad a Javier Fernández, el hombre serio para construir una Asturias en serio.
Ayer, unas cinco mil personas, llenábamos el palacio de los deportes de Gijón. Ésa imagen no la vivimos ni en mayo ni menos aún en noviembre. Noto en la ciudadanía una mejor acogida hacia nuestras ideas. Una mayor acogida hacia lo que Javier representa.
Yo hoy, en este último día de campaña, os invito a la reflexión. Tomo prestadas las palabras de Felipe González cuando dijo que "la democracia no garantiza el buen gobierno, sólo garantiza que podemos quitarnos de encima el gobierno que no gobierna y no nos gusta. Hagámoslo el domingo".
El próximo Domingo 25 de marzo, los asturianos y asturianas estamos llamados a las urnas, a elegir con nuestro voto al próximo Presidente de Asturias.
Las gentes de Laviana, ante estas cruciales elecciones, no debemos quedarnos en casa. El derecho a la participación política lo vamos a demostrar acudiendo a votar la opción que mejor represente nuestros intereses como ciudadanos y ciudadanas.
Necesitamos elegir un Presidente cuya seriedad, compromiso e ilusión sea capaz de cohesionar, de aunar esfuerzos para solucionar los problemas de sus gentes en momentos tan difíciles como los que vivimos. Un Presidente que lidere, dialogue, integre y marque rumbo decidido hacia un futuro más digno y más humano.
UN PRESIDENTE QUE GOBIERNE.
Por eso, un grupo de hombres y mujeres de Laviana, conscientes de nuestra responsabilidad, queremos que Laviana apueste por una Asturias en serio: la que representa Javier Fernández.
Apelamos al voto de hombres y mujeres que creen que Asturias no puede permitirse más tiempo sin Gobierno. A los hombres y mujeres que apuestan por la seguridad, la garantía y la seriedad que la historia de Asturias se merece.
Por eso, hacemos un llamamiento a todas las gentes de Laviana -a todas- para que el próximo domingo votemos la opción del PSOE y a Javier Fernández como Presidente de Asturias.
Arranca la campaña electoral de cara a los comicios del 25 de marzo. Unas elecciones que, en mi opinión, nunca deberían de haber tenido lugar y que si se ha llegado a este escenario es, sencillamente, por la irresponsibilidad de aquellos que, sumando la mayoría suficiente, no han llegado a acuerdos.
Pero hoy quiero, de una forma especial, daros razones para votar. Y más en concreto, para votar la opción del PSOE, la que encabeza Javier Fernández. De entrada ya digo algo: no busquéis aquí insultos o referencias despectivas hacia ningún candidato o candidata. Ésa no es mi forma de ser. Nunca lo ha sido y nunca lo será. Los insultos quedan fuera de mi escenario.
Os pido el voto para Javier Fernández -y yo voy a votarlo- porque en estas elecciones se trata de decidir si queremos asegurar un Gobierno estable para Asturias o queremos seguir en manos de posibles pactos que luego nunca llegan -a los hechos me remito-.
Os pido el voto para Javier Fernández, porque es el momento de construir una Asturias en serio. Una Asturias que recupere su imagen ante España. Porque Javier tiene algo que ningún otro candidato o candidata puede aportar con la misma fuerza en este momento: la seridad.
Os pido el voto para Javier Fernández, porque en estos tiempos de dura crisis económica, necesitamos un Gobierno de Asturias que apueste por la educación y la sanidad públicas y de calidad -que no se privaticen-, por el desarrollo de la Ley de Dependencia, por los Servicios Sociales que atiendan a mayores, niños y discapacitados. Un gobierno, en fin, que haga de la Igualdad su referencia.
Os pido el voto para Javier Fernández porque él, mejor que nadie, va a poner todas las ganas para fortalecer nuestro sector industrial, la puesta en marcha de políticas activas de empleo o la defensa del mantenimiento del sector minero más allá del 2018. Y como alcalde, porque sé que va a defender con uñas y dientes el mantenimiento de los fondos mineros (del mantenimiento de los fondos mineros, dependen muchos millones de inversión en los pueblos de Laviana)
Os pido el voto para Javier Fernández y para el PSOE, porque ya hemos visto, por dos veces, qué sucede en Asturias cuando las fuerzas políticas conservadoras tienen mayoría de votos.
Éstas son razones para votar la opción del PSOE, para votar a Javier Fernández. Sé que hay mucha gente cabreada con estas nuevas elecciones. Sé que hay muchas personas que están dudando seriamente sobre si ir a votar o no. Yo apelo a la responsabilidad de todos.
Apelo a las personas progresistas pero también me dirijo a aquellas personas que no se sienten socialistas pero que, en esta ocasión, se plantean la posibilidad de votar a Javier Fernández, porque ven en él representada la seriedad que necesita Asturias. Animo a todas esas personas a hacerlo, a votar a Javier Fernández, a apostar por un Presidente que tiene por bandera la seriedad. Apelo a todas aquellas personas que están escandalizadas con la situación política de Asturias. A ellas me dirijo y les pido un esfuerzo: hagamos una Asturias en serio. Hagamos que Asturias tenga un Gobierno estable y que de soluciones.
Con todo el respeto hacia el resto de candidatos y candidatas -entre ellos el actual Presidente de Asturias- hoy la respuesta a las inquietudes de Asturias tiene un nombre: Javier Fernández.
Uno de los males endémicos de la Política es el transfuguismo. Es decir, los abandonos de la disciplina del partido por intereses personales que llevan a no respetar la voluntad de los ciudadanos a favor de unas ideas, siglas y personas que se expresan en el voto a una candidatura completa.
Una nueva muestra de este mal se ha vivido hoy en Siero. Cuatro concejales, ajenos a la decisión de su Partido -el PP-, suspendidos de militancia y que son, a los ojos de la ciudadanía, concejales transfugas, han aúpado un nuevo alcalde en contra del sentir mayoritario de los sierenses. Esto último no es una impresión personal. Es una realidad que se palpa en las calles de Siero.
Quiero recordar, en este sentido, que hace unos meses se reformó la Ley Orgánica del Régimen Electoral General buscando, precisamente, evitar que el campo municipal se convierta en un campo propicio para el transfuguismo. Se establecía, gracias a esa reforma, que en aquellos casos en los que una moción de censura fuera presentada por concejales sin el apoyo de la organización política por la que fueron elegidos, debía, para salir adelante la moción, contar con un apoyo reforzado, de un voto más por cada concejal tránsfuga que la firmara. Es necesario, ahora, esperar a que los ámbitos jurisdiccionales competentes analicen este asunto para garantizar que la reforma legal realizada en su momento no quede en una mera declaración de intenciones sin contenido práctico.
Y entro ya a lo personal. Cuatro personas, ajenas al sentir del partido por el que fueron elegidos, han desbancado de la Alcaldía a Guillermo Martínez. A mis compañeros y amigos de Siero, a Guillermo, les quiero decir algo: han sido un Gobierno ejemplar. Cuatro tránsfugas le han quitado la Alcaldía.
Los ciudadanos y ciudadanas de Siero se la devolverán en el 2015.
No serán cuatro, serán miles. ¡Que el mañana llegue pronto!